Seguramente todos nos acordaremos de la perversa Glenn Close, el no menos perverso John Malkovich y la angelical y dulce Michelle Pfeiffer en la grandísima película de Stephen Frears "Las amistades peligrosas". La obra de teatro que tuvimos oportunidad de ver el pasado viernes en el Centro Cultural de la Villa (Madrid) es una versión libre de la obra de Pierre Choderlos de Laclos de la que salimos totalmente fascinados.
Blanca Portillo y Asier Etxeandía nos hacen olvidar los papeles interpretados por sus homónimos en el cine, pero de ellos hablaremos un poco después.
La adaptación (como he dicho antes, bastante libre) de la obra literaria tiene el siguiente argumento central: La Marquesa de Merteuil y el Vizconde de Valmont, que en otro tiempo llegaron a ser amantes, se aprovechan del mejor modo que pueden de la sociedad puritana y privilegiada en la que viven. Estos dos personajes depravados no dejan de enviarse cartas a lo largo de toda la historia que se narra en el libro en las que se cuentan sus hazañas, que constituyen la trama de la historia. Sin embargo, a pesar de ser rivales, no están en igualdad. El vizconde de Valmont, por su condición de hombre, puede hacer alarde de su condición de libertino y gozar incluso por ello de una cierta reputación. Las cartas que dirige a la marquesa de Merteuil sólo son el relato de sus aventuras.
A partir de aquí entran en acción los tres personajes (además de un narrador) en esta impresionante obra teatral. Asier interpreta al Vizconde de Valmont y Blanca a la -mala malísima- Marquesa de Merteuil y a la -de tan buena tonta- Madame de Tourvel (aunque en la obra de teatro, el personaje de ésta sea algo realmente anecdótico).
Aunque a Blanca Portillo se le conoce fundamentalmente por su papel de Carlota en la serie "7 vidas" y recientemente por haber ganado la Concha de plata a la mejor actriz en el Festival de Cine de San Sebastián, su vagage es fundamentalmente teatral. No hay más que echar un vistazo a la wikipedia para darnos cuenta que Blanca ha trabajado desde sus comienzos en 24 obras, ha dirigido otras 4 y ha interpretado 9 películas, así como una serie de televisión ... (de dónde sacaré el tiempo esta mujer!!!). En "BARROCO" son indescriptibles las sensaciones que te puede hacer pasar. El teatro es el medio en el que se desenvuelve como pez en el agua, sobre todo si tiene al lado alguien que de la talla.
Y por dar la talla que no quede: Asier Etxeandía, además de ser muy alto y habernos dejado impresionados en su obra anterior (interpretó al Maestro de Ceremonias de "CABARET"), aquí desplega todo su arsenal interpretativo (canta, coreografía, grita, susurra, se retuerce ...) para acompañar a la portillo en un duelo dificilmente superable ...
La música acentúa lo perversa que es la obra en sí y te hace entrar de lleno en un mundo lleno de seducción y mentiras en el que el miedo, el valor, la esperanza y la desesperación van a convertirse en un juego sin ganadores.
Y de justicia es también reseñar el papel que interpreta Chema León como narrador de la historia ...
Si hubiera algún pero, quizás las concesiones que se permite la obra para introducir determinados elementos estéticos en la misma (las sandías y las uvas -no revelo spoiler por si alguien va a verla-). También la concesión de las canciones (quizás más para lucimiento de Asier que otra cosa). Sería igual de impresionante si no existieran.
PUNTUACIÓN: 8´5/10
BARROCO: Centro Cultural de la Villa. Plaza de Colón (Madrid). Hasta el 21 de Octubre.
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